La paz social se perdió en casi todo el estado de Quintana Roo. Pero en algunas zonas del estado la situación de inseguridad pública es casi similar a la que se vive en momentos de guerra civil. Los puntos críticos son Cancun Y Playa del Carmen donde ya es alto el índice de los delitos que se cometen diariamente.
Todos los partidos políticos, todas las organizaciones sociales, todos los grupos y los habitantes en general, manifiestan como demanda común que se garantice la seguridad pública.
El reclamo de seguridad pública es una exigencia en la sociedad que se expresa como un derecho. Particularmente en la zona norte de Quintana Roo que es la que tiene mayor índice delictivo.
La mayoría de los Cancunenses exigen que se garantice la seguridad pública; se combata a la corrupción y a la impunidad. Miles de personas exigen responsabilidad, eficiencia y castigos severos a los delincuentes. Es que el problema de la inseguridad y procuración de la justicia se ha agravado en los últimos años y particularmente en la zona norte como la de Cancun y playa del Carmen, donde el desafío de la delincuencia es abierto y audaz, como el de las guerrillas.
Ya es inaplazable asegurar la eficiencia de los sistemas de seguridad y garantizar a todos los quintanarroenses la posibilidad de vivir en un Estado de derecho que no favorezca a los delincuentes. Los organismos de derechos humanos deben promover la defensa de las víctimas de la inseguridad y la mala procuración de la justicia y no de los hampones y delincuentes.
Las actividades delictivas no solamente afectan a algunos sectores sociales de la población o de algunas regiones determinadas. Constituyen un problema que acosa y preocupa a los quintanarroenses de todas las clases sociales y de todo el Estado.
Es un problema ya generalizado y de consecuencias muy negativas y lamentables para el estado en su conjunto. Muchos capitales están dejándose de invertir en Quintana Roo por la inseguridad.
Aparte de los delitos de alto impacto son diversas las causas que se han señalado para explicar los orígenes de la inseguridad pública. En las reuniones sobre el tema se exponen varios: Los factores que afectan la convivencia social, problemas derivados de la falta de empleo; la corrupción de los cuerpos de seguridad, el abuso de autoridad y la impunidad. Sin embargo lo evidente es que hasta hoy no han sido acertadas las medidas adoptadas para resolver este problema.
Es urgente garantizar a todos los ciudadanos la posibilidad de vivir en un ambiente de seguridad pública. Esta no debe ser una simple promesa de campaña para el futuro. Es una demanda que debe atenderse urgentemente hoy. La principal razón para que se organice el Estado es la de garantizar a todos los ciudadanos la seguridad pública. Efectivamente este problema es prioritario.
Apropiadamente todos se han pronunciado a favor de mantener nuestro Estado de Derecho y mejorar las leyes y la impartición de justicia, así como mejorar los cuerpos encargados de garantizar la seguridad pública. Somos un pueblo que merece organizar su convivencia dentro de un ambiente regido por principios, una gran moralidad pública y el respeto a la seguridad personal.
Es claro para todos los Quintanarroenses que no existe un cuerpo policial que permita responder a los retos de la delincuencia, ni siquiera al interior de los municipios, en particular, en la mayoría de los regiones difíciles, no se aprecia cuando se controlara tales índices, pese a que en algunos lugares se hayan tomado por la policía como el crucero, aun se ve que los índices de delincuencia son altos.
Las dependencias policíacas, no tienen una forma de organización definida, en muchas ocasiones las improvisaciones y ocurrencias son una constante, en otras más, es evidente la corrupción desde los más altos funcionarios.
En tanto en otros países, aun que no sea resuelto el problema por completo, si se han tomado algunas acciones inmediatas, al menos en la capacitación adecuada, en donde la formación policial está basada en la formación académica, en la información, principalmente en la gestión del conocimiento .
Debemos considerar que seguridad, es el conjunto de conocimientos, medidas y dispositivos empleados, con el fin de prevenir riesgos. En la primera característica, se nota que el conjunto de conocimientos no es una constante en su mayoría, los cuerpos policíacos cuentan cuando mucho con estudios de secundaria, en la zona norte ni siquiera se llega, en su formación, al nivel primario terminado. Las medidas y dispositivos empleados, son los violentos y pocos efectivos, lo que ocasiona que en muchas ocasiones violen los derechos humanos de los detenidos.
Todos los partidos políticos, todas las organizaciones sociales, todos los grupos y los habitantes en general, manifiestan como demanda común que se garantice la seguridad pública.
El reclamo de seguridad pública es una exigencia en la sociedad que se expresa como un derecho. Particularmente en la zona norte de Quintana Roo que es la que tiene mayor índice delictivo.
La mayoría de los Cancunenses exigen que se garantice la seguridad pública; se combata a la corrupción y a la impunidad. Miles de personas exigen responsabilidad, eficiencia y castigos severos a los delincuentes. Es que el problema de la inseguridad y procuración de la justicia se ha agravado en los últimos años y particularmente en la zona norte como la de Cancun y playa del Carmen, donde el desafío de la delincuencia es abierto y audaz, como el de las guerrillas.
Ya es inaplazable asegurar la eficiencia de los sistemas de seguridad y garantizar a todos los quintanarroenses la posibilidad de vivir en un Estado de derecho que no favorezca a los delincuentes. Los organismos de derechos humanos deben promover la defensa de las víctimas de la inseguridad y la mala procuración de la justicia y no de los hampones y delincuentes.
Las actividades delictivas no solamente afectan a algunos sectores sociales de la población o de algunas regiones determinadas. Constituyen un problema que acosa y preocupa a los quintanarroenses de todas las clases sociales y de todo el Estado.
Es un problema ya generalizado y de consecuencias muy negativas y lamentables para el estado en su conjunto. Muchos capitales están dejándose de invertir en Quintana Roo por la inseguridad.
Aparte de los delitos de alto impacto son diversas las causas que se han señalado para explicar los orígenes de la inseguridad pública. En las reuniones sobre el tema se exponen varios: Los factores que afectan la convivencia social, problemas derivados de la falta de empleo; la corrupción de los cuerpos de seguridad, el abuso de autoridad y la impunidad. Sin embargo lo evidente es que hasta hoy no han sido acertadas las medidas adoptadas para resolver este problema.
Es urgente garantizar a todos los ciudadanos la posibilidad de vivir en un ambiente de seguridad pública. Esta no debe ser una simple promesa de campaña para el futuro. Es una demanda que debe atenderse urgentemente hoy. La principal razón para que se organice el Estado es la de garantizar a todos los ciudadanos la seguridad pública. Efectivamente este problema es prioritario.
Apropiadamente todos se han pronunciado a favor de mantener nuestro Estado de Derecho y mejorar las leyes y la impartición de justicia, así como mejorar los cuerpos encargados de garantizar la seguridad pública. Somos un pueblo que merece organizar su convivencia dentro de un ambiente regido por principios, una gran moralidad pública y el respeto a la seguridad personal.
Es claro para todos los Quintanarroenses que no existe un cuerpo policial que permita responder a los retos de la delincuencia, ni siquiera al interior de los municipios, en particular, en la mayoría de los regiones difíciles, no se aprecia cuando se controlara tales índices, pese a que en algunos lugares se hayan tomado por la policía como el crucero, aun se ve que los índices de delincuencia son altos.
Las dependencias policíacas, no tienen una forma de organización definida, en muchas ocasiones las improvisaciones y ocurrencias son una constante, en otras más, es evidente la corrupción desde los más altos funcionarios.
En tanto en otros países, aun que no sea resuelto el problema por completo, si se han tomado algunas acciones inmediatas, al menos en la capacitación adecuada, en donde la formación policial está basada en la formación académica, en la información, principalmente en la gestión del conocimiento .
Debemos considerar que seguridad, es el conjunto de conocimientos, medidas y dispositivos empleados, con el fin de prevenir riesgos. En la primera característica, se nota que el conjunto de conocimientos no es una constante en su mayoría, los cuerpos policíacos cuentan cuando mucho con estudios de secundaria, en la zona norte ni siquiera se llega, en su formación, al nivel primario terminado. Las medidas y dispositivos empleados, son los violentos y pocos efectivos, lo que ocasiona que en muchas ocasiones violen los derechos humanos de los detenidos.
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