domingo, 12 de julio de 2009

Todos Quietos “Félix Gonzalez”



“Cuando la lucha entre facciones es intensa, el político se interesa, no por todo el pueblo, sino por el sector a que él pertenece. Los demás son, a su juicio, extranjeros, enemigos, incluso piratas”.
De manera normal las elecciones federales del 2009 se convirtió en el eje de reacomodos y confrontaciones de los grupos en busca del poder; la agenda será diferida ha sido pospuesta por la politización, habrá parálisis legislativa y signos de confrontación entre los diferentes grupos
Estamos a menos de 2 años de que concluya un año pautado por una premura en todo con un reloj político que marca las horas en el tema económico.
La carrera por una sucesión gubernamental adelantada y la renovación de las alcaldías, implica, “en ser un foco rojo, para los acuerdos que de nuevo perfilan a ser inalcanzables e inacabados. El próximo el escenario político será complicado.
Los aspirantes a la gubernatura o a cualquier alcaldía no coadyuvan a aliviar las tensiones. “mantener la unidad y la concordia” será una labor complicada. Los candidatos no son ni serán precisamente, el mejor ejemplo de unidad y concordia.
La sucesión de Félix Gonzalez
Hay temas que son difíciles de abordar de manera pública, pero que por su importancia es ineludible hacerlo, este el de la sucesión de Félix Gonzalez Canto es uno de ellos.
De otra forma, el silencio y el dejar pasar las repercusiones de los hechos públicos, sólo abonarán a una mayor confusión, a la simulación y al extravió de la confrontación de intereses en la desbocada lucha del poder por el poder.
En efecto, llama la atención la absurda pretensión de crear una atmósfera mediática para generalizar la idea de que la sucesión del Gobernador ya se consumó dejando entrever a los candidatos más viables.
Esta estrategia -profusamente difundida por sus promotores- se funda en el albazo del titular del Poder Ejecutivo pero todo indica que, pese a los comprensibles lazos políticos y de amistad con el posible sucesor, quizá sea la decisión más idónea; habida cuenta de las repercusiones inmediatas y futuras.
Se explica así que a los pocos días después de las elecciones federales, el propio titular del Poder Ejecutivo hubo de formular importantes declaraciones para acotar la naturaleza y el contexto de los hechos. Todos quietos dice Félix algo así como el que se mueva no sale en la foto, las claras precisiones del Gobernador no han sido asumidas con la seriedad y profundidad con que fueron formuladas.
Que se respeten los tiempos electorales; y resolver primero el 2009 como ya se hizo después el 2011, de manera que no se genere confusión y mucho menos ingobernabilidad;
La declaración será una lectura entre líneas que no tiene un aspirante favorito ni una segunda carta; y que será escrupuloso, neutral y responsable ante el Partido, para que sean la ciudadanía y los priistas, quienes decidan quién será el candidato;
Que las encuestas son prematuras ya que la gente todavía ve lejana la sucesión; y que el gobernador será congruente con el compromiso asumido de respetar los tiempos y las formas para evitar confusión y riesgos de ingobernabilidad.
Aspirantes declarados
Hace falta que todos los aspirantes declarados, y los que se agreguen, algunos jugando ya en el filo de la navaja, asuman un compromiso público que, en los hechos, sea real y tangible. De otra manera los que hoy son riesgos podrían convertirse en una monstruosa pesadilla de pasiones, intereses e insaciables apetitos de poder. El fantasma de tan indeseable alucinación podría ya haber irrumpido en las tensiones del Gabinete, en las tentativas de guerra sucia, en la pugna entre grupos económicos y mediáticos y en las inexplicables decisiones en algunos de los distritos electorales federales que, lamentablemente, tendrán un costo electoral.
No hay nuevas reglas del juego
No hay nuevas reglas del juego que normen la contienda por el poder, por lo que los actores políticos están rebasando todos los límites antes conocidos en la búsqueda del poder, donde le han dado una dimensión exagerada a la función pública, mediante estrategias de marketing político y de videocracia que la sociedad percibe que son muy costosas y que hay un derroche de recursos, que han encendido las pasiones y el encono entre adversarios partidarios y/o candidatos. La ciudadanía ha estado expresando con múltiples mensajes de su escepticismo e indiferencia hacia la política, que son claros signos que presagian manifestaciones y tensión social.

La politización del acontecer nacional y el epicentro de la sucesión gubernamental adelantada, a saturado a la ciudadanía ante el predominio de la política electoral, donde queda claro que la realización de comicios trasparentes y validos había sido un viejo anhelo de la joven y raquítica democracia del estado, pero esta no debe agotarse en las urnas, sino también en la viabilidad de los gobiernos; donde el sistema de representación sea real y no como una parte de la búsqueda del poder partidaria.
Los auto destapes de los candidatos o aspirantes no le restan legitimidad a las aspiraciones. La lucha por el poder predomina en el entorno estatal será una dura y encarnizada batalla la que viene los diferentes clanes los joaquinistas, villanuevistas, borgistas y felixistas, el menjurje completo vela armas.

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