¿El voto blanco, Antipatriotas vs Mentirosos?

La mentira es la base de la ley, de la política, de lo que llaman justicia. La verdad es el primer impulso de tus pensamientos.

Atreverse a llamar antipatriota a Tatiana Clouthier hija del legendario Manuel J. Clouthier, Maquío, quien fuera candidato presidencial del PAN en las elecciones de 1988. De verdad es de mentirosos e inexpertos en materia de política sobre todo de aquellos políticos quienes han hecho de aliada a la mentira, y entendamos a la mentira como una falsedad genuina o una verdad selectiva, exagerar una verdad o incluso la verdad, si la intención es engañar o causar una acción en contra de los intereses del oyente. Las ficciones, aunque falsas, no se consideran mentiras. Mentir es decir una mentira. A las personas que dicen una mentira, especialmente a aquellas que las dicen frecuentemente, se las califica de mentirosas. Mentir implica un engaño intencionado, consciente, y estudios demuestran que el ser humano tarda más mintiendo que diciendo la verdad como le sucede a frecuentemente a los políticos de nuestro lastimado Cancún. Ahora bien habría que definir el termino antipatriota aunque primero deberíamos conocer El vocablo "Patria" la cual nos remonta a la cultura romana. La patria, tierra de los antepasados o padres, tenía un origen mítico. Era una donación de los dioses. Sin embargo, su sentido principal no estuvo relacionado ni a la tierra específicamente ni a priori, y con las nuevas conquistas romanas la patria se fue extendiendo. Ahora bien el concepto de patria que mas se acerca a los políticos de patio es la de Maquiavelo cuando este llama a la unión de los italianos, haciéndolo en base a esta génesis cultural hoy conocida como La Nación concepto que vendría a ser una etapa de comunidad posterior a la Patria y con vigencia actual .

Los políticos partidarios del patriotismo y el nacionalismo usan el término anti patriotismo en forma peyorativa y en un sentido generalizado, en contraparte los partidarios del anti patriotismo usan los términos cosmopolitanismo o ciudadano del mundo para referirse a sus ideas específicas y evitar confusiones.

La promoción del voto blanco que motivo este desgarre de vestiduras de políticos de patio se dio cuando Tatiana Clouthier anuncio el surgimiento de un movimiento ciudadano que, a través del "voto de blanco" y en muchos casos del "voto en blanco" para el próximo 5 de julio, manifestará su rechazo a la "dictadura de los partidos". Al Considerar que "entre más se acerca el proceso electoral, entre más salen los anuncios del IFE, la gente más se asquea de este proceso electoral. El 52 por ciento de la población, dice, se identifica con el voto en blanco.

El llamado al voto en blanco tiene como origen el hartazgo de la mayoría de los mexicanos ante gobiernos ineptos, corruptos, abusivos e indiferentes

Candidaturas ciudadanas

El movimiento del que se habla estaría encaminado a que se permitieran las candidaturas ciudadanas bajo tres ejes rectores: seguridad jurídica en esos términos, seguridad física y seguridad de un país sustentable. Un país que se pueda sostener y que pueda seguir funcionando y caminando.

No cabe duda que el voto nulo responde al "ya basta" y hartazgo de la partidocracia y al gobierno de la impunidad y de la corrupción. El voto blanco les da miedo a los partidos y al incrédulo sistema político.

Cuando el presidente del Instituto Federal Electoral, Leonardo Valdés, advierte a los promotores y simpatizantes del voto blanco que, “aunque sumen millones, no existe en la ley una causal de nulidad de la elección por el número de este tipo de sufragios”, parece desestimar o ignorar la verdadera reclamación: el hartazgo de la mayoría de los mexicanos ante gobiernos ineptos, corruptos, abusivos e indiferentes, y un sistema de partidos cerrado y arbitrario.

“No votar o anular el voto es quedar al margen de la conformación del Poder Legislativo y de la vida institucional”, señala el tan cuestionado árbitro de comicios. Valdés, o confunde las cosas o, de plano, no las acaba de entender. Si un cuantioso número de electores está considerando declarar nulo su voto el próximo 5 de julio, no es con la intención de anular la elección. Se trata de presentar una forma de protesta ante el fracaso de los gobiernos, de la escandalosa corrupción en la que viven los mexicanos, del abuso de las familias enquistadas en el poder y de la desesperanza que se vive en prácticamente toda la República.

El voto blanco no es para “quedar al margen de la vida institucional”. Es, en realidad, un voto de protesta contra los abusos de gobiernos y de la partidocracia. Es un voto para “reformar, abrir, refrescar el sistema de partidos”, Voto blanco que envíe el mensaje claro de que la situación del país ha llegado ya a un punto de quiebre y por supuesto no es posible seguir bajo los mismos soportes partidistas.

En el fondo, y tras la exhortación “unificada” de los ocho partidos políticos para votar en las elecciones intermedias, está el miedo de que, fuera de los partidos, surjan verdaderas alternativas políticas y sociales que respondan de manera más eficaz y sensible a las necesidades de más de 100 millones de mexicanos.

Los partidos y políticos tienen miedo

Los partidos políticos tienen miedo de que, de reformarse el actual sistema partidista, nazcan nuevos líderes sociales que pudieran encauzar, de manera positiva, el enorme descontento social que cunde en la nación, y que se conviertan en los gobernantes que nuestro país requiere. Miedo a que otras organizaciones políticas, más allá de las oficialistas y tradicionales, sean una nueva alternativa para sacar a México de la postración política, económica y social que hoy se enfrenta.

Miedo a tener candidatos ciudadanos. Miedo a nuevas formas de hacer política. Miedo a otro discurso. Miedo a que lleguen otros y sí sepan hacer el trabajo. Miedo a un cambio verdadero.

Análisis del voto blanco

Si analizamos sus efectos, el voto en blanco pierde todo su atractivo. ¿Qué pasaría si la campaña llegara a tener éxito? Imaginémonos que tras la jornada electoral del próximo 5 de julio, el IFE reportara un crecimiento significativo del voto nulo. Los impulsores de la campaña pronostican que con ello se estaría dando “el primer paso para la reconstrucción de la forma de hacer política en México”.

Cuesta mucho trabajo creerlo, por varias razones. El resultado relevante para definir qué candidato gana un distrito, repartir escaños de representación proporcional y definir qué partidos mantienen su registro es la “votación efectiva”. Los votos nulos o por candidatos no registrados simplemente se hacen a un lado. Si estos dos rubros crecen, la votación efectiva disminuye. Con ello, se necesitan menos votos para ganar un distrito.

¿Por qué votar en blanco?

Los partidos, y el Instituto Federal Electoral, deben entender que, en el fondo, el voto blanco o de protesta es contra las calamidades que han hundido al país